
20 Feb Nadie me dijo: crear y criar
Hace días que tengo ganas de presentaros este libro, pero entre niña y trabajo, a veces me queda muy poco tiempo para sentarme y escribir cuatro líneas. Y, precisamente, de criar y crear va este libro tan especial: Nadie me dijo, de Hollie McNish, editado por La señora Dalloway.
No quisiera cansaros con el tema de la maternidad, pero es obvio que ser madre supone una gran revolución, un gran tsunami emocional para las mujeres. Y, obviamente, yo no escapo a ello. Es curioso porque recuerdo que cuando yo estaba embarazada me juré y perjuré que no leería libros de maternidad, ni crianza ni educación, porque ¿cómo iba a leer esos libros teniendo una lista interminable de obras de ficción pendientes de ser leídas? Ah, pero, la maternidad es así, contradictoria, ambivalente, y aquí estoy yo devorando libros de pedagogía y ahora de maternidad y crianza desde el punto de vista de la mujer y de lo que ocurre en su pensamiento, cuerpo y alma durante esa etapa.
Por eso, me acerqué a Nadie me djio de la poeta Hollie McNish, ya que se trata de un diario salpicado de poemas que escribió, durante su embarazo y los tres primeros años de su hija, con el objetivo de hablar de la realidad de la maternidad y explicarnos todo aquello que nadie nos cuenta –o nos cuentan poco. De hecho, pensándolo bien, yo que renegaba de este tipo de libros ¿no es en el fondo la maternidad una gran historia en si misma? Quien necesita historias ficcionadas, cuando este tema es una de las historia más grandes jamás contada y que poco se refleja en la literatura… Pero de eso ya hablaremos otro día.
Así que en esta fase de intentar entenderme en mi nuevo papel y buscando libros sobre maternidad, hallé a Hollie y fue como hallar a una amiga con la que te sientes acompañada, comprendida y, que en las largas noches de no dormir, te abraza suavemente con sus palabras y sus versos. En definitiva, fue como encontrarme un poco a mí misma.
Valoro en esta obra tan sincera la franqueza de sus palabras y sus pensamientos tan cercanos a cualquier madre que esté criando. Aquí no hay medias tintas y el diario de Hollie –que podría ser el diario de cualquier madre en cuanto a sentimientos explorados y experiencias compartidas- está lleno de realidad y de humor, de dolor y de alegría, en un juego de contradictorios propios de la maternidad y la crianza.
Sus poemas desmitifican tópicos y reflejan inquietudes del día a día de las madres primerizas–y creo que no solo de esas-: la burbuja del puerperio, la fascinación hacia la lactancia, la búsqueda (frustrante) de tiempo personal, la realización creativa como mujer/madre, la responsabilidad de la crianza en esta sociedad dominada por los machismos, el marketing y la publicidad, la conquista del espacio personal con el tiempo, los prejuicios sociales, el sexo postbebés y así un largo etcétera.
Los elementos que más me han gustado de esta obra han sido la visión y el tono que ha planteado McNish, ni edulcorado ni dramático, sino de un frágil equilibrio –pero equilibrio posible, al fin y al cabo- entre las luces y las sombras, que supone la revolución personal de la maternidad. Y, por supuesto, me ha alentado profundamente ver como la autora siguió su periplo creativo, poco a poco, mientras criaba los primeros años, a pesar de dormir poco y del cansancio permanente. Criar y crear es posible. Nadie dijo que fuera fácil, ninguna de las dos cosas lo es por separado, y menos, cuando van de la mano. Pero, sin duda, la experiencia de la maternidad también da impulso y energía para recordar nuestros propios deseos. Solo necesitamos algo de ese escaso tiempo que a veces se nos niega los primeros años de crianza.
Si tenéis a alguna amiga que próximamente vaya a ser madre, dejaros de regalarle canastillas ni libros sobre cuidados del bebé, regalarle Nadie me dijo y será el mejor compañero de viaje en los largos y fascinantes días de la crianza. Y si ya has sido madre, hace más o menos tiempo, el diario de McNish te devolverá y reconciliará con esa madre primeriza y perdida que un día fuiste.
Te dejo con uno de los poemas de Hollie McNish sobre la lactancia materna
(está en inglés).
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